Mi Colección: Delahaze de Paradise Seeds

Una de las ultimas incorporaciones a mi colección y la primera que tengo de las geneticas de Paradise Seeds:

Delahaze

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Delahaze es una variedad espléndida. Es extremadamente potente y una gran productora que termina temprano, en 9 semanas arpoximadamente. Para apreciarla plenamente, ha de dejarse una semana extra, lo que resulta en un delicado haze/sativoso que llena el cultivo con un hermoso aroma que insinua citricos y mango. Aun la tipica escencia haze permanece dominante.

 

Hay gran probabilidad de que estas plantas engorden, ya que ellas crecen multiples ramas llenas de cúmulos de flores cubiertas en resina. Es por eso que sugerimos inducir la floracion temprano antes de que crezcan demasiado.

 

El subidon es trepador y claro. Tras un rato notará un agradable y placentero efecto físico-corporal. En general un subidon eufórico y elevador, no psicodelico o triposo, muchos fumadores y cultivadores han clasificado la Delahaze entre sus tres haze favoritas.

 

* 2o premio Champions Cup España 2009

 

Características

 

Tipo: mayormente sativa 70% Florecimiento: aproximadamente 9 semanas en Interior. Exterior a principios de noviembre (n.L.) Producción: mas de 500 g/m2 en Interior. Exterior, mas de 1000 gramos por planta. Ambiente: Interior. Exterior entre 45 n.L. y 45 s.L. Efecto/zumbido: El subidon es trepador y claro a la cabeza, activo. Sin panico. Olor/Gusto: combinacion de mango dulce o citrico con dominancia tipica del sabor haze. THC: 15-18%

Esta variedad la podeis comprar en nuestra tienda: Semillalandia

Fuente: Paradise Seeds

El punto de partida: Mantequilla de marihuana

La mantequilla de marihuana es la base de todo cocinero alegre. Una vez asimilado este paso, podremos cocinar un seguido de postres o más recetas tradicionales, pero dándole todo el sabor y las propiedades del cannabis.

La elaboración de mantequilla de marihuana es la opción ideal para aquellas personas no fumadoras que también quieren beneficiarse de las cualidades de la marihuana medicinal. Al mismo tiempo, es otra opción para aquellos que ya disfrutan con su humo, pues ingerirla es otra vía de experimentación no menos psicodélica.

Antes que nada, debemos advertir que la marihuana ingerida tiene un poder psicoactivo bastante mayor que al consumirla fumada o vaporizada, por dos causas:

  • Al fumarla aprovechamos sólo un 40 % de la materia verde, ya que el resto se convierte en humo y se volatiliza. Si nos la comemos aprovechamos el 100% de la marihuana.
  • Porque el THC a su paso por los riñones sufre una transformación que incrementa fuertemente su potencial psicodélico. Es por ello que tenemos que tener mucho cuidado con las dosis.

Para contrarrestar el potencial del cannabis ingerido, elaboraremos la mantequilla con los restos más rancios de la cosecha de marihuana, pequeñas hojas resinosas e incluso hojas grandes (menos recomendables).

Consumir cannabis ingerido, además, proporciona cierta estabilidad. Esto es debido a que al usuario le es más fácil conocer la dosis ideal, y basta con saciar esa misma dosis cada día al ingerir la porción de marihuana. Al fumarla o vaporizarla, es más complicado conseguir la estabilidad del consumidor.

Efectos de la mantequilla de marihuana

Es muy importante saber que una vez hecha la marihuana debemos tener mucho cuidado cuando la probemos. Aconsejamos empezar probando una cantidad pequeña, y poco a poco ir aumentado la dosis hasta que alcancemos las cantidad adecuada que cure las dolencias.

Para los que la tomen por primera vez, el cannabis ingerido tarda entre media hora y una hora en hacer efecto, por lo que se recomienda esperar como mínimo este tiempo antes de aumentar la dosis.

Antes de empezar…

Te recomendamos que antes de ponerte manos a la obra, organices bien tu espacio y prepares el material que vas a necesitar:

  • Cazo
  • Colador
  • Recipiente para dejar enfriar la mantequilla elaborada.
  • Bote hermético; fiambrera,…

Ingredientes:

  • Medio litro de agua
  • 250 gramos de mantequilla (NO margarina)
  • 30/50 gramos de restos de hojas resinosas y algun pequeño cogollo (si utilizamos buenos cogollos debemos reducirlo a 1/4 parte).

La porción de marihuana por gramo de mantequilla es un cálculo orientativo. Hemos de tener en cuenta que cada tipo de marihuana tiene diferente cantidad de THC, por lo que si crees que siguiendo estos pasos no has obtenido el resultado que esperabas (ya sea para más o para menos) te animamos a que lo intentes de nuevo. Prueba a tantear un poco con las proporciones, pero ¡recuerda los efectos! Haznos saber qué cambios has realizado, y cuéntanos tu aventura: nosotros también nos queremos reír.

La receta

En primer lugar, recomendamos triturar la marihuana para favorecer la disolución de la resina en la grasa de la mantequilla.

Ponemos a hervir el agua en el cazo, y cuando esté hirviendo añadimos la marihuana triturada. Recomendamos cambiar el agua con la que estemos hirviendo la marihuana como mínimo una vez, pues este procedimiento limpia las hojas de la clorofila y acentúa su gusto. A continuación añadimos la mantequilla al cazo. Durante este proceso, el THC del cannabis se mezcla con el agua y la mantequilla.

Dejamos reposar la mezcla a fuego lento durante media hora, sin que llegue a hervir fervorosamente, y removemos de vez en cuando. Ten en cuanta que cuanto más hierva, más THC va a absorber el agua. Seguidamente, colamos la mezcla para desechar los restos vegetales.

Clica aquí para ver un vídeo del proceso paso a paso, esperemos que te ayude.

Vertemos el líquido restante en el recipiente y lo guardamos en la nevera durante varias horas (no menos de 6 horas, o hasta que se solidifique). Vemos que la mantequilla queda por encima del agua, debido a que la mantequilla tiene menor densidad. Separamos la mantequilla de marihuana del agua con la ayuda de un colador, y la guardamos en un bote hermético para ponerla de nuevo en la nevera. ¡Listo!

Ahora, prueba a untar un poco de la mantequilla en una tostada, o prepara un bizcocho con ella. Pero sobre todo, ¡cuéntanos tu experiencia!

¡Salud y buenos humos!

Horticultura del cannabis(II)

CRECIMIENTO VEGETATIVO

El crecimiento vegetativo de las plantas se mantiene cuando se proporcionan entre 16 y 24 horas de luz diariamente. A medida que la planta madura, las raices adquieren funciones especializadas. La parte central, asi como otras porciones envejecidas, contienen un sistema de transporte de agua y, además, pueden contener alimentos.
Las puntas de las raices producen células de elongación, que continuan adentrandose en la tierra en busca de agua y nutrientes. Las raices capilares unicelulares son las que realmente absorven agua y los nutrientes. Sin agua, las frágiles raices capilares se secan y mueren. Son muy delicadas, y se dañan fácilmente si son manipuladas por manos torpes o si son expuestas a la luz y el aire. Sobre todo mucho cuidado al trasplantar. Al igual que las raíces, el tallo crece por elongación y, además va produciendo nuevas yemas a lo largo de su desarrollo.
La yema central dirige el crecimiento hacia arriba y las yemas laterales se convierten en hojas o ramas. El tallo funciona como vehiculo para la trasmisión de agua y nutrientes desde las delicadas raices capilares hasta los brotes de crecimiento, hojas y flores. Los azúcares y almidones fabricados en las hojas se distribuyen a través de la planta por medio del tallo. Se trata de un flujo líquido que tiene lugar cerca de la superficie del mismo, si el tallo se ha sujetado demasiado fuerte con cuerdas y otros tipos de ataduras, se cortará el movimiento de los fluidos vitales, estrangulando y matando la planta. El tallo además, mantiene rígida la planta con un tipo de celulosa especializada, que se localiza en las paredes internas.
Al aire libre, la lluvia y el viento empujan las plantas por todos lados, fomentando una producción elevada de celulosa rígida que las mantenga derechas. En espacios de interior, sin la presencia natural del viento y la lluvia, la producción de celulosa es mínima, así que las plantas desarrollan tallos débiles y pueden necesitar que se las tutore especialmente durante la floración. Una vez las hojas se han expandido comienzan a fabricar alimentos. La clorofila convierte el dióxido de carbono, presente en el aire, el agua y la energia luminosa en carbohidratos y oxígeno. Este proceso llamado fitosíntesis, requiere el agua que absorben las raices y que, a través del tallo llega hasta las hojas, donde se encuentra con dióxido de carbono. En el envés de las hojas unos diminutos poros respiratorios, los estomas canalizan la cantidad de CO2 que entra en contacto con el agua.

Para que la fotosíntesis tenga lugar, el tejido anterior de la hoja debe permanecer húmedo. Los estomas se abren y cierran para regular este flujo de humedad, previniendo la deshidratación. Las hojas de la marihuana, además, están protegidas de la desecación por una piel externa. Asi mismo, los estomas permiten la salida del vapor de agua y el oxígeno residual. Los estomas son muy importantes para el bienestar de la planta y deben mantenerse limpios para promover el crecimiento vigoroso.
Unos estomas sucios y abstruidos respiran tan bien como cualquiera de nosotros con la cabeza metida en un saco.
Cervantes, Jorge. Marihuana: horticultura del cannabis. La biblia del cultivador médico de interior y exterior. (2006)