Este fin de semana me voy a pasar unos días a unos apartamentos con la familia, hasta ahí todo bien ¿no?. Pero a los que cultivan no tan bien, un golpe de calor a sus plantas y sin nadie que les eche agua y cosecha al carajo.
La solución es sencilla y no muy cara: montaremos un sistema de riego automático, para el cual necesitaremos:
- Un deposito para el agua (Puede ser un cubo de los grandes que usan los hoteles para el yogur o mayonesa que tienen tapa y son 17 litros)
- Un sistema de riego automático, yo recomiendo el Wassertech
- Una bomba para oxigenar el agua y evitar que los fertilizantes se depositen en el suelo.
Una vez tengamos todo empezaremos el montaje. Lo primero es saber donde vamos a depositar el deposito del agua, ya que de ello dependerá el tamaño que le demos a las mangueras.
Si ya tenemos claro la ubicación pasaremos a medir y a cortar las mangueras, que no queden justas pero tampoco que sobre mucha manguera.
Colocaremos la bomba de agua, normalmente se coloca fuera y la manguera de silicona que manda el oxigeno se inserta dentro del deposito para que oxigene y remueva el agua. Este aparato se puede prescindir de el, siempre y cuando removamos la mezcla cada rato o simplemente reguemos con agua o sea algo provisional.
Una vez colocado insertamos en el deposito el sistema de riego, le enchufamos las mangueras, tapamos los huecos libres y configuramos el riego. En el sistema que les recomiendo podéis configurar cada cuanto tiempo regamos y cuanto tiempo.
Importante es poner la manguera lo mas cerca del tallo de la planta para que sea más efectivo.
Fuente: Agroweed